domingo, 18 de noviembre de 2012

Barranco de Abdet.

Sábado 17 de noviembre de 2012.
Lleva lloviendo toda la semana y pensando que los barrancos tienen que ir llenos decidimos aprovechar la ocasión para hacer el barranco de Abdet. la aproximación y demás logística está muy bien explicada en este enlace del Centro excursionista de Ontinyent. llegamos al pueblo de Abdet sobre las 10 de la mañana y somos el penúltimo grupo que va a bajar por el barranco, los demás han madrugado . Para nosotros es buena hora porque pensamos quedarnos a comer en el bar del pueblo: preparan una olleta muy buena.Sobre las 10 h. 30' empezamos el descenso.
La primera impresión que nos ofrece el barranco ya nos da una idea de que baja bravo. En el bar  ya nos habían dicho que el viernes muchos de los que vinieron a hacerlo no se atrevieron por la fuerza con que bajaba. Hoy es diferente. Ya no llueve, el caudal ha mermado y, aunque no se parece en nada a la imagen que tenemos de las veces que lo hemos hecho en verano, no ofrece dificultad.
En el primer rappel adelantamos a un grupo numeroso que nos ceden el paso ya que nosotros al ser tres vamos más rápido.
El barranco está absolutamente precioso en su bravura, además el día acompaña, hace sol que favorece la luminosidad del barranco.
Una gozada sentir la fuerza del caudal en el cuerpo al hacer los diversos rappeles que se van presentando
 Que diferencia hacerlo en verano con un caudal ecológico a la bajada de hoy con agua por todos los lados.
Entre bromas y miradas de admiración hacia el paisaje que nos rodea vamos haciendo tranquilamente la bajada 
y cuando estamos a 500 m de la vía de salida: Julia al dejarse caer por un tobogán de medio metro de altura aterriza con su pie derecho en una roca del fondo y siente un agudo dolor. No podemos definirlo más que como mala suerte porque el movimiento que ha realizado era totalmente anodino y sin riesgo por ningún lado. De hecho yo pensé que se había rozado a la altura de la mitad de la tibia con alguna roca alta. La primera mirada nos ofrece una imagen inquietante del pie derecho a la altura del tobillo. Ella tiene un fuerte dolor. En principio estamos paralizados pero rápidamente Julio se pone en acción y decide que hemos de intentar bajarla a una zona un poco más abierta donde algún equipo de rescate pueda actuar más favorablemente. Conseguimos bajar unos 200 m con un sufrimiento extremo por parte de Julia, que si bien le duele horrores intenta no quejarse, también porque ve en nuestra cara un poso de preocupación. Cuando llegamos a una zona más abierta ponemos a Julia en el único lugar seco fuera del agua y, sorprendentemente, al intentar llamar por teléfono vemos que hay cobertura. Conseguimos contactar con el 012 y explicar la situación.
Mientras tanto Julia está bastante calmada y el pie no le duele si no lo toca ni lo mueve.
En esta situación vamos a pasar un buen rato. Nos van a pasar los dos grupos que iban por detrás de nosotros y, especialmente, el último grupo se preocupa por la situación y dicen que llamarán e insistirán desde el pueblo por si perdemos la cobertura. Julia, cada vez, está más calmada, sobre todo porque al no moverse evita que el dolor se apodere de ella.
Pasamos 1 h. y media esperando y mientras tanto nos van comunicando que enviarán un helicóptero de Valencia porque el que había en Alicante lo han suprimido (malditos recortes y malditos políticos recortadores). Cuando llega el helicóptero nos divisan rápidamente y en un abrir y cerrar de ojos tenemos a Julia subida al el y nosotros encaminándonos para acabar el barranco. Nos quedaban no más de 200 m. pero con la lesión que tenía hubiera sido imposible que aguantara tanto dolor.
Ni comimos olleta ni tuvimos una agradable sobremesa porque inmediatamente cogimos el coche para ir a La Vilajoiosa, al hospital de la Marina donde le hicieron las primeras atenciones y,como había lista de espera  bastante larga para operar, recogimos a Julia y la llevamos al hospital 9 d'octubre donde la operarán el domingo por la tarde.
Lo que iba a ser un bonito día de barranco compartido con amigos se acaba convirtiendo en una pesadilla por culpa del maldito azar fortuito ya que, como he dicho, el momento en que ocurrió no revestía más peligro que el bajar una escalera de 3 escalones.
Ya sólo pido que no sea grave la fractura  de Julia y que se recupere plenamente para que siga disfrutando de la naturaleza que tanto ama en la compañía de su querido Julio.

3 comentarios:

  1. Hola Antonio, espero que tu amiga Julia se recupere cuanto antes y la operacion salga bien, un saludo

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  2. esperamos desde el club tracalet y pelacanyons la pronta recuperación de la xiqueta ,)

    un abrazo y nos vemos en breve niña!

    Ari

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