Este año no empecé muy bien,
físicamente hablando. Unas ligeras molestias en el gemelo derecho fueron
haciéndose dueñas de todo el grupo muscular hasta impedirme participar en el
interesantísimo trail
de l’infer de la Vall de Laguar. Tomé la salida pero al km tuve que
retirarme renqueante.
Los Himalayeros al completo. |
Lo que iba a ser un trail en toda regla quedó reducido a
una volta a peu de un kilómetro por el pueblo de Orba y la alegría de ver pasar a los compañeros en los lugares en los que nos apostamos.
La senda para ir a les Juvees |
El 7 de marzo tampoco me presenté
a la ruta senderista organizada por Els Coixos de Carlet: La pujada a les tres
gràcies. Una ruta no competitiva con unos avituallamientos inmejorables y una
muy grata compañía. Pero tampoco pudo ser.
El 24 de marzo me operan,
aparejado de una baja y lenta recuperación en la que, aún, me encuentro. Ya
camino unos 6 km suaves, a 10’ el km, pero nada de correr.
El 26 de marzo era una de las
pruebas clave para este año. La USLP, duatlón de
correr y bici de montaña con salida y llegada en Atzaneta. El año pasado se me
rompió la percha del cambiador y tuve que hacer toda la bajada en bici sin
poder pedalear (15 km.). Este año quería sacarme la espinita y ahora tengo dos.
Tampoco puedo hacer el trail de Cullera, que lo teníamos
incrustado como entrenamiento para el maratón
de La Alcudia de Veo. Este sí que me da pena pues formaba parte de la Challenge maratón.
El 9 de mayo teníamos el trail solidari de Alcoi, carrera
por equipos. Nos cogieron en la repesca pero tuve que ceder mi puesto a otro
Himalayero (componente del club de montaña). Salió un día bochornoso pero
cumplieron, aunque al final, Ramón tampoco pudo asistir y sólo entraron tres
componentes.
A mí me llevaron para que pudiera verlos entrar disfrutando a la meta. Estuvo bien el viaje y verlos tan contentos y cansados. También aproveché para saludar a Jessica Mataix, magnífica corredora con un blog muy interesante.
Con Jéssica. |
Coincidí
con ella en la Ehunmilak, pero no habíamos hablado en persona. Al final me hacen subir con el grupo a recoger la medalla.
El 16 de mayo tenía la tercera
prueba más importante y deseada de la temporada: Trencacims Paüls. 50 km por la comarca
dels Ports. Lo teníamos programado como un fin de semana montañero con reserva en Paüls. Seguro que nos lo
habríamos pasado fenomenal. Con todo lo que tiene para enseñar y ver. Cachis.
La siguiente carrera a la que ya
estaba inscrito es la maratón
nocturna de Xiva. Se correrá el 13 de Junio. El año pasado quedé el primero
de la categoría y este año no computará. Además forma parte de la Challenge de
la que he hablado.
La última a la que estaba
inscrito, y que era la carrera ultra del año, a la que va dirigida todo el
entrenamiento era la Echappee Belle.
Carrera de 144 km y 13000 metros de desnivel positivo, muy técnica. Aunque es a
finales de agosto y, supongo, ya estaré recuperado, no me encontraré con suficiente
forma para afrontar tamaño reto. Así que la dejo para el año que viene.
Espero que la próxima carrera en
la que participe sea la maratón
de Javalambre. Sin expectativas de ningún tipo, sólo con la intención de
probarme y ver cómo va la recuperación. A ver si levanto cabeza.